Al llegar les negaron el refugio.
No les importó demasiado y siguieron andando.
La lluvia fina les mojaba la cara.
Descansaron un momento bajo un árbol.
El viento arrancó el árbol de cuajo.
Siguieron andando puesto que habían descansado,
o al menos eso creían ellos.
Empapados.
Se miraron a los ojos.
Se besaron en silencio.
Levantaron la cara al cielo,
y el viento se los llevó estrechamente abrazados,
quién sabe adonde.
6 comentarios:
si fuera yo y tal vez si fueras...mmmmmmmmmm
creo que no me importaría donde el viento, o el minuto aquel me llevar, jejje, creo que lo único claro que tengo es donde terminaría..jejejeje.
volví y vine por ti y te encontré.
dejo
suaves caricias
de añoranzas y reencuentro
cuidese
besitos
que importa adonde...
iban estrechados y besandose...
el resto no importaría!!
besos querido mio...
Dónde? en verdad valdría la pena saberlo? con un beso y un abrazo sincero lo que menos vale es el dónde o el cuando!
Que me lleve el viento hasta el fin del mundo!
Bonito el relato!
Que Dios te Bendiga!
Y al lado de quien se quiere, que importa el lugar o hacia adonde se vaya...
Saludos
Chau
Repleto de imágenes. Entre dos que se aman así... que el viento los vuele a cualquier lugar.
Saludos
Saber que existe un "dónde" me llena de ilusión, de placer.
En ese "dónde" se refugia esa parte de amor inclaudicable que me persigue, que me lleva, que me introduce en los mundos deseados, y con amor,mucho amor.
Te dejo besos Amigo.
Cuidate mucho.
PD: Hice un lío barbaro con las direcciones de mis blogs...en fin sólo las cabie una por otra...no me puedo quedar quieta...sino hago cambios me siento muy muy incompleta.
Más besos y abrazos desde la calurosa Buenos Aires.
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